Intentando dar un cierre al período de formación académica, vuelvo sobre mis pasos para reflexionar sobre las búsquedas y decisiones que me llevaron hacia el diseño de iluminación. 
Cuando ingresé en la carrera mi objetivo era dedicarme al diseño lumínico en el rubro de la música en vivo, quería diseñar y operar luces en recitales de rock, fusionar luz y sonido, generando un espacio donde cohabiten  desde una mirada totalmente personal con respecto a lo que me significaba cada sonoridad y/o letra en vínculo con la visión y las necesidades específicas de cada banda. Nací en un entorno familiar en el cual la música siempre estuvo muy presente. Mi padre, mi tío y mi abuelo son músicos aficionados, cantantes e instrumentistas, aunque no se dedicaron profesionalmente, siendo los tres peluqueros de oficio, este amor por la música lo llevaron a todos los ámbitos de su vida. Sus peluquerías solían reunir a un sinfín de músicos y personajes del ambiente, y todas ellas albergaban una gran variedad de instrumentos a los que cualquiera podía darle uso, pianos, violines, panderetas, guitarras, acordeones, entre otros.
Así desde muy chica la música me fue guiando entre cassettes, discos, recitales, y hasta un breve período de estudio musical al cual no le dí continuidad.
Con las herramientas técnicas básicas que me brindaron en los primeros años de la carrera pude iniciar rápidamente en la operación de luces para bandas ad honorem formando parte de ese mundo desde un lugar creativo, de acción compartida y como parte constitutiva del show. A la par y dado que la carrera está dirigida a la aplicación del diseño de iluminación en el teatro, ingresé como técnica operadora en salas del circuito teatral independiente y casi a la par empecé a realizar propuestas lumínicas para diferentes puestas.
Luego de un período de tiempo relativamente extenso decidí abandonar toda práctica y abocarme de lleno a la finalización de mis estudios, los cuales, habían quedado en segundo plano.

En este tiempo sin actividad específica en el rubro de la iluminación logré profundizar mi vínculo con la fotografía y fue a través de ella que continué desarrollando mi interés por la luz, la música y el teatro dedicándome a la fotografía de espectáculos y de autor.
Desde esta disciplina, me mantuve en los ámbitos de interés y pude a través de ellos analizar y reflexionar sobre los usos y formas de iluminar en la escena teatral y musical específicamente del ámbito independiente. Los últimos dos años de carrera me brindaron un gran aprendizaje de métodos y sistemas de trabajo relacionados al diseño que suscitaron en mi un gran interés por investigar sobre la propia historia del diseño de iluminación en nuestro país, las tradiciones, las formas, los conceptos, la tecnología, las infraestructuras y la formación académica del diseñador.  

El proyecto de graduación intenta dar respuesta a través de su formulación a este cúmulo de inquietudes, intereses y reflexiones  sobre el rol del diseñador de iluminación, en relación con las formas de percibir y de habitar el mundo.
En mi rol como diseñadora mi interés esta puesto en pensar la luz más allá de la luz, es decir, la luz en constante relación con el mundo y no como un ente autónomo y/o limitado a aplicarse sobre un contenido.